Contenedores de almacén

Los contenedores son un tipo de soporte para la manipulación y almacenaje de la mercancía, con la que forman una unidad de carga. Su forma permite que los productos se alojen en su interior y queden protegidos de los posibles golpes en el transporte.

Suelen utilizarse contenedores con las mismas medidas que el palet europeo, para posibilitar su transporte con el mismo tipo de carretillas elevadoras, así como su ubicación en cualquier tipo de sistema de almacenaje.

También existen otro tipo de contenedores con diferentes medidas para usos específicos. Además, e igual que ocurre con los palets, pueden fabricarse con tres tipos de materiales distintos, que resuelven necesidades concretas. Los principales tipos de contenedores, en función del material de fabricación, son los siguientes:

  • Contenedores de madera: suelen construirse sobre una base formada por un europalet de madera, por lo que pueden utilizarse tanto para el transporte como para el almacenaje en estanterías.

  • Contenedores de plástico: cuando se construyen sobre la base de un europalet de plástico, cumplen las mismas funciones y están especialmente recomendados para el sector de la alimentación.

  • Contenedores metálicos: por su resistencia, están especialmente indicados para el transporte de mercancía delicada. Para su almacenaje en estanterías convencionales es necesario colocar soportes específicos.

Por último, hay otro tipo de contenedor para el transporte de productos pequeños, que son las cajas de plástico. Para facilitar su manipulación suelen colocarse sobre palets, por lo que sus medidas son submúltiplos del palet europeo, siendo las más utilizadas las cajas Eurobox de 600 x 400 mm. 

 

Contenedor de plástico