El camino hacia una cadena de suministro autónoma
¿Es factible lograr una cadena de suministro autónoma, en la que todos los eslabones se rijan por la digitalización y la robotización? La respuesta es todavía una incógnita. Pero los avances tecnológicos ─como la conectividad 5G, el cloud computing, la inteligencia artificial o el internet de las cosas (IoT)─ permiten que poco a poco se vislumbre la posibilidad de lograr una cadena de suministro totalmente autónoma, que no requiera de la intervención humana en etapas como la planificación, ejecución o supervisión de procesos.
Cadena de suministro autónoma: presente y futuro
Una cadena de suministro autónoma es aquella capaz de automatizar, digitalizar y robotizar todos sus procesos, desde el diseño de productos o la planificación de operativas hasta la expedición y entrega de mercancía al cliente final. Implementar una cadena de suministro completamente autónoma requeriría que fases como el aprovisionamiento de mercancía, la monitorización del rendimiento y la distribución de productos se realicen de forma automática, con la mínima intervención humana.
El camino hacia una cadena de suministro completamente autónoma es todavía un concepto futurista, pero cada vez existen más soluciones que automatizan una amplia gama de procesos y permiten alcanzar mayores niveles de autonomía en eslabones concretos de la logística.
Por ejemplo, la automatización robótica de procesos (RPA, por sus siglas en inglés) contribuye a automatizar procesos en la gestión de la cadena de suministro: permite replicar y ejecutar tareas de carácter rutinario y repetitivo anteriormente desarrolladas por humanos, como extraer datos, rellenar formularios, realizar cálculos avanzados y ejecutar múltiples procedimientos sin errores. Aunque la tecnología RPA ofrece múltiples beneficios para las empresas, la autonomía de estos robots de software es todavía limitada, ya que desarrollan acciones basadas en reglas previamente definidas.
Una de las operativas de la cadena de suministro que ya pueden automatizarse completamente es la planificación logística. Según los analistas de McKinsey, autores de la publicación Iniciando el recorrido hacia la planificación autónoma de la cadena de suministro, “en la práctica, la planificación autónoma hace posibles decisiones continuas y apoyadas en análisis automatizados en todas las áreas de la cadena de valor de planificación, destinando la intervención humana solo a gestionar excepciones. En otras palabras, las máquinas hacen lo que mejor saben hacer –procesar datos y aplicar analítica avanzada–, liberando tiempo de los planificadores para dedicarlo a actividades con más valor agregado”.
Uno de los motores de la cadena de suministro autónoma del futuro será la hiperautomatización, un término acuñado por la consultora estadounidense Gartner, que combina tecnologías de automatización avanzadas. Consiste en integrar tecnologías como la RPA, la inteligencia artificial, el machine learning o el big data para poder ejecutar acciones determinadas de modo completamente autónomo, con la mínima intervención humana. Aplicada a la cadena de suministro, la hiperautomatización alienta la integración de tecnologías avanzadas para lograr niveles de autonomía cada vez mayores. Según Gartner, en los próximos diez años, las cadenas de suministro serán más autónomas: “La hiperautomatización aumentará las capacidades de toma de decisiones de las personas y respaldará la creación de una cadena de suministro autónoma. Esta cadena de suministro del futuro podrá planificar en tiempo real y de forma automática, así como ejecutar acciones operativas automatizadas de manera frecuente y rentable”.
Características de una cadena de suministro autónoma
Más allá de la falta de intervención humana, la cadena de suministro autónoma se caracterizará por ser:
- Predictiva: la monitorización avanzada de datos e indicadores de rendimiento transversales ayudará a predecir errores e ineficiencias en los flujos de trabajo y de mercancías, así como futuros cuellos de botella a lo largo de todas las fases implicadas en la cadena de suministro.
- Inteligente: la cadena de suministro autónoma se apoyará en el uso de las nuevas tecnologías para procesar datos, identificar tendencias y detectar oportunidades que incrementen la eficiencia de las operativas logísticas que tienen lugar dentro y fuera de la instalación.
- Escalable: tendrá la capacidad de ser dúctil y flexible ante las demandas cambiantes de la cadena de suministro 4.0. Será capaz de escalar automáticamente las operaciones para garantizar la eficiencia en los picos de demanda y reducir los recursos en épocas de menor volumen de órdenes de salida.
- Integrada: la cadena de suministro autónoma impulsará la digitalización completa de procesos para sincronizar todas las operativas logísticas entre las compañías que participan en el diseño, fabricación y comercialización de un producto. Una cadena de suministro integrada favorecerá la completa trazabilidad de la mercancía, es decir, el seguimiento del ciclo de vida de un producto, desde la fase de diseño, pasando por la producción, el procesado y la distribución hasta el cliente final.
Beneficios de contar con una cadena de suministro autónoma
Según un estudio del Institute for Manufacturing de la Universidad de Cambridge, “las nuevas tecnologías como el internet de las cosas y la inteligencia artificial ofrecen a las compañías la oportunidad de transformar las cadenas de suministro lineales en cadenas de suministro autónomas”. Los beneficios de contar con una cadena de suministro autónoma son múltiples, entre los que destacan "ayudar a reducir costes de mano de obra y mejorar la eficiencia operativa mediante la automatización de tareas rutinarias de la cadena de suministro”, afirman los investigadores.
La robotización y la comunicación transversal entre los distintos eslabones de la cadena de suministro podría aportar, entre otros beneficios:
- Aumento de la productividad: implementar soluciones automáticas en un almacén o centro de producción asegura un abastecimiento constante de mercancía a las líneas de montaje o a la zona de almacenaje, otorgando flujos de mercancía ininterrumpidos. Extender la automatización a lo largo de la cadena de suministro permitiría automatizar tareas rutinarias y mejorar la eficiencia operativa en los diferentes eslabones.
- Reducción de errores: instalar soluciones automáticas basadas en tecnologías como la inteligencia artificial o la RPA en toda la supply chain minimizaría la probabilidad de fallos en la gestión de procesos y en la manipulación de mercancía.
- Mayor trazabilidad de producto: gestionar los diferentes flujos de comunicación de una cadena de suministro de manera combinada garantizará la trazabilidad integral del stock, porque cada actor tendrá acceso a la información almacenada en la nube.
- Visión holística y enfocada al cliente: la digitalización integral de las operativas en la cadena de suministro permitirá que todas las compañías que participan en los diferentes eslabones estén integradas y en comunicación directa y bidireccional, adquiriendo una visión holística del proceso.
El informe de McKinsey Autonomous supply chain planning for consumer goods companies, constata que “la planificación autónoma de la cadena de suministro puede suponer un aumento de los ingresos de hasta el 4%, una reducción del inventario de hasta el 20% y una disminución de los costes de la cadena de suministro de hasta el 10%”.
Software para una cadena de suministro autónoma
La transformación digital de procesos ha de ser la piedra angular de una cadena de suministro completamente autónoma. En la actualidad, ya existen múltiples soluciones digitales que multiplican el rendimiento del almacén y que permiten una gestión automatizada de los procesos como, por ejemplo, un software de gestión de almacenes o un distributed order management. La digitalización de las operativas permite establecer una conexión de datos veraz y en tiempo real entre los diferentes eslabones de la cadena de suministro.
La toma de decisiones autónoma será uno de los pilares de la cadena de suministro del futuro. En este contexto, los software avanzados posibilitan predecir escenarios, anticiparse a cambios en la demanda o variar las estrategias logísticas del almacén según las necesidades de la instalación. La colaboración entre programas digitales permite una visión holística de la cadena de suministro, como indica la consultora McKinsey en su estudio: “Los análisis avanzados integrados en toda la cadena de suministro, yendo más allá de la funcionalidad estándar del software para los procesos individuales, permiten crear una conexión directa entre las previsiones de la demanda y los pedidos hasta el calendario y el plan de producción”.
La gestión digital es una realidad cada vez más frecuente en aquellos almacenes que necesitan multiplicar el rendimiento, eliminar errores y reducir los costes logísticos. En ese camino, la implantación de un software de gestión de almacenes será una pieza clave para construir una cadena de suministro autónoma, en la que predomine la integración de todos los actores que participan en los procesos logísticos. La digitalización posibilita que el software de almacenes se conecte con otros programas que se ejecuten en las diferentes fases de la cadena de suministro, sean de la compañía o de otra organización, para mejorar el intercambio de información y automatizar tareas, promoviendo unos niveles avanzados de trazabilidad de producto y operativas más eficientes.
Cadena de suministro autónoma, un nuevo paradigma
En la actualidad, ya existe un amplio número de soluciones digitales y robóticas que están transformando el mundo industrial y que limitan la intervención humana en procesos logísticos y productivos. Pero todavía queda un largo camino por recorrer para alcanzar una cadena de suministro completamente autónoma.
En este nuevo paradigma industrial, tecnologías como el internet de las cosas, el machine learning o la computación en la nube jugarán un papel clave. Los programas digitales, como un software de gestión de almacenes, contribuirán a la transformación de la cadena de suministro, eliminando el riesgo de error derivado de la gestión manual.
El futuro de la cadena de suministro dependerá de los avances tecnológicos y de la capacidad de las empresas de integrar las últimas tecnologías en sus procesos para impulsar la autonomía en las operativas y en la toma de decisiones.